Pues sí, como en el fútbol o en la F1, que desde el lunes te hinchan a previos del partido/carrera del domingo. Cómo no sé por dónde empezar, me presentaré y contaré cómo he llegado hasta aquí.
En septiembre de 2008, a la tierna edad de 22 añitos (y a pocos días de cumplir los 23) presenté mi proyecto final de carrera, el último trámite para que la Universidad Carlos III de Madrid me diera las dos carreras que empecé 5 años antes. Lo de las dos carreras impresiona mucho de entrada, pero si digo que son Periodismo y Comunicación Audiovisual (dos de las cosas más inútiles del catálogo de titulaciones) pierdo prestigio. Mientras tanto, me dio por pasar las tardes nadando (que no sirve para nada en el curriculum) y aprendiendo alemán (que queda bastante bien en un curriculum).
Con estos antecedentes, decidí pedir una beca Leonardo y me preseleccionaron dos veces (una para trabajar en Austria y otra para trabajar en Alemania) pero no pasé a la fase de selección. Hasta que hace un par de semanas, de pronto, recibo una llamada de un número privado. Lo cogí y me encontré con un señor que hablaba inglés con cierto acento centroeuropeo. Resultó ser una llamada de Berlín, de la segunda preselección, que necesitaba a otro becario y ya tenían mi curriculum del proceso anterior.
Tras dos semanas de llamadas, papeleos (que, por vuestro propio bien, os voy a ahorrar), quebraderos de cabeza, mentiras ("no, mamá, no pienso quedarme en Berlín cuando se me termine la beca"), despedidas express y gestiones varias, tengo fecha para irme: el 11 de abril. Y también para empezar a trabajar: el 13 de abril. Y para entrar a vivir en un piso: el 15 de abril (que eso será si consigo ponerme en contacto con el que me va a alquilar la habitación). Y aquí seguimos, contando el tiempo que falta, programando las últimas despedidas (que a estas alturas ya no sé quién falta y quién no), haciendo la maleta y buscando mapas de Berlín. A ver en qué termina todo esto.
lunes, 6 de abril de 2009
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Ahí mi chica! A la aventura!! Mucha suerte guapa!! Estas cosas son las que te forman como persona.
ResponderEliminar(Ufff es que me pongo en un plan madre madre inaguantable)
Entonces, si no he entendido mal, además de ser becaria en Berlín, ¿vas a pasar dos días en la indigencia?
ResponderEliminar(¿Puedo custodiar mientras tu maleta de mano? ¿Puedo, puedo? Ya sabes que mi economía no me permite viajar, así que la custodia será eso, custodia.)
@ Mamen: estas cosas fortalecen el cuerpo y el espíritu (como se decía del servicio militar obligatorio en otras épocas).
ResponderEliminar@ Hell's Tea: a ver si vas a ser como uno que yo me sé, que me vaticinó que acabaría viviendo en un parque.
(Bueno, pero en mayo me la devuelves, que me la pienso llevar para allá tras el bodorrio)
Has visto que al final el aleman ha servido para algo más que para poner en el CV???
ResponderEliminarQuién quiere dos carreras si sabes aleman!!!!!
Pues sip. Hace un par de minutos me ha servido para pedirle al señor del piso que me mande un e-mail con todos los detalles y explicaciones pertinentes. Por cierto, que hablar por teléfono con un alemán griposo (en alemán, por supuesto) es todo un reto.
ResponderEliminar¿seguro que no estabas hablando con un británico -no, un australiano mejor- borracho?
ResponderEliminarPeor hubiera sido hablar con un escocés
ResponderEliminarAclaración (por si hay algún escocés en la sala): no tengo nada en contra de los escoceses (especialmente de Ewan McGregor, como muchos ya sabrán) pero hay que reconocer que tienen una forma de usar el inglés bastante jodida para el resto de los mortales.
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